Qué es una rotura de ligamentos
Los ligamentos están formados por fibras de colágeno cuya función es limitar el movimiento de las articulaciones para evitar sobrepasar los límites tanto anatómicos como biomecánicos. La rodilla tiene cuatro ligamentos que le permiten mantenerse estable: los ligamentos cruzados anterior y posterior y los laterales interno y externo.
La rotura de ligamentos es resultado de un cambio brusco en la dirección de la rodilla, ya sea por un movimiento exagerado o un golpe. Es común en deportistas, ten en cuenta que la rotura ligamento cruzado es una de las lesiones más temidas por los futbolistas. Una rotura de ligamentos de rodilla se da al apoyar mal tu pie luego de un salgo o como respuesta a una frenada repentina en una carrera, entre otros.
A diferencia de una distensión de ligamentos, cuyo tiempo de recuperación son pocas semanas, la ruptura de ligamento cruzado puede tardar meses en recuperarse e incluso es posible no recuperar la movilidad por completo, requiriendo una intervención quirúrgica.
Síntomas de rotura de ligamentos
La ligamento cruzado anterior es la más común, aunque la de ligamento posterior también suele afectar a deportistas. Entre sus síntomas principales se destacan los siguientes.
- Chasquido. En el momento en que se produce la rotura ligamento cruzado anterior es posible que oigas un chasquido en la zona de la rodilla.
- Dolor intenso. La rotura de ligamento cruzado provoca un dolor muy fuerte que te impedirá mantenerte de pie.
- Inestabilidad. Sufrir de un ligamento cruzado anterior roto no sólo te impedirá mantenerte de pie y apoyar tu pierna, sino que también notarás cierta inestabilidad en la articulación de tu rodilla.
- Movimientos limitados. La ruptura de ligamento cruzado anterior limita notablemente los movimientos, no sólo por el dolor o la rotura en sí, sino que también porque es normal que la zona de inflame.
Los ligamentos de rodilla pueden ser más sensibles de lo que te imaginas y un mal movimiento puede afectarlos más de lo que parece. Sin embargo no debes hacer un autodiagnóstico, siempre debes ir a un médico que sabrá con seguridad si lo tuyo es una rotura de ligamento cruzado anterior u otra lesión en la zona. Tu médico te practicará diferentes tipos de pruebas: primero preguntará que sientes, luego realizará algunos exámenes físicos y en finalmente, para evaluar correctamente la lesión, te enviará a estudios radiológicos y resonancia magnética.
Tratamiento para una lesión de ligamentos
La rehabilitación ligamento cruzado anterior suele ser larga, dependiendo de su gravedad. En primer lugar debes hacer todo lo posible para reducir la inflamación, ten en cuenta los siguientes consejos.
- Reposo absoluto. Como en todos los tipos de lesiones, en un primer momento está recomendado el reposo absoluto.
- Aplica hielo. Los primeros tres días es muy importante que apliques hielo en la zona cada entre 10 y 15 minutos cada dos o tres horas, dependiendo de como sientas la inflamación y el dolor.
- Usa vendaje. Es posible que tu médico te recomiende el uso de una rodillera de ligamento cruzado anterior o algún tipo de vendaje.
- Mantén la pierna elevada. Es recomendable que mantengas la pierna elevada siempre que puedas.
- Utilizar apoyos. Durante la primera semana usa muletas o un bastón en los momentos en que necesites caminar.
- Intervención quirúrgica. Hay algunos casos en que los médicos recomiendan una intervención quirúrgica, luego de esta deberás seguir los consejos de tu cirujano.
- Volver a entrenar. A pesar de que el reposo total es el primer paso para la recuperación, luego debes comenzar a practicar ejercicios para evitar la atrofia de la articulación y para reforzar los músculos de la rodilla. La electroestimulación, natación y ciclismo son algunos de los ejercicios más recomendados.
Cómo prevenir una lesión ligamento cruzado
¿Es posible prevenir una lesión ligamento cruzado anterior? Cuando practicas deportes de forma intensa es difícil evitarla al 100%, pero lo que si puedes hacer es tomar las precauciones necesarias para reducir las probabilidades de sufrir una rotura de ligamentos de la rodilla.
- Elección del espacio. La elección de un suelo o cancha en buen estado para entrenar es muy importante. Así como también los elementos que utilizas en el entrenamiento.
- Corrige tu entrenamiento. La rotura de ligamento cruzado generalmente es provocada por malos movimientos, giros, caídas fuertes luego de saltos... es por esto que es tan importante entrenar a conciencia. Corrige tu técnica, evita mecanismos que puedan provocar lesiones y realiza ejercicios para potenciar tu musculatura, evitando desequilibrio musculares y dando más estabilidad a tus articulaciones.
Recetas para deportistas
Los ligamentos cruzados rodilla no son la única parte del cuerpo que pueden resultar heridos durante el entrenamiento deportivo. Ya conoces los mejores consejos para evitar una ruptura de ligamento, muchos aplican a prevenir otro tipo de lesiones. Pero la alimentación también es una parte importante del entrenamiento, conoce algunas recetas deliciosas que puedes incorporar en tu dieta.
- Recetas proteícas vegetarianas. Si no quieres comer carne pero necesitas incorporar proteínas para tus entrenamientos no olvides incorporar todu, seitán, lentejas, brócoli, quinoa y espinacas.
- Barras energéticas. El aporte nutricional de las barras nutricionales naturales de higo y nueces es excelente y no puedes dejar de probarlas, tu cuerpo te lo agradecerá.
- Dieta para aumentar masa muscular. Existen algunos trucos para aumentar tu masa muscular, debes incorporar calorías, proteínas, hidratos de carbono y grasas saludables, además de saber elegir qué debes comer antes y después de entrenar.
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