Los 5 síntomas de resistencia a la insulina a los que debes atender

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Qué es la resistencia a la insulina

La resistencia a la insulina es el nombre que se le da al problema de salud provocado por la falta de respuesta normal de tu organismo a la insulina, producida por el páncreas, lo que dificulta la penetración de la glucosa en las células. También podrás encontrarla como sensibilidad a la insulina, insulinorresistencia o hiperinsulinemia.

Entonces ¿qué es la insulina? Pues, es una hormona que produce tu páncreas, encargada de regular los niveles de glucosa en sangre (almacenamiento, transporte y uso de la glucosa como fuente de energía para tu cuerpo).

Cuando tu cuerpo no puede sintetizar correctamente la insulina se producen niveles elevados de insulina en sangre, así como de glucosa, provocando una sobreproducción de ácidos grasos que bloquean el trabajo de la insulina, acumulándose en el tejido adiposo abdominal, hígado y músculos.

La resistencia a la insulina puede ser causada por la predisposición genética, pero también por hábitos de vida que afectan tu metabolismo como el aumento de peso, obesidad, sedentarismo, una alimentación con excesos de carbohidratos, hipertesión o el aumento de colesterol y triglicéridos. Las alteraciones hormonales también pueden ser un factor de riesgo, principalmente en las mujeres.

Es importante no confundir a la diabetes mellitus con la resistencia a la insulina, ya que aunque comparten algunos síntomas y sus definiciones son similares no son lo mismo. Sin embargo los síntomas de resistencia a la insulina pueden ser un antecedente de la diabetes tipo 2, con el paso de algunos meses o años (esto es debido a que el páncreas comienza a fallar, disminuyendo la cantidad de insulina que produce). Para que no te quedes con dudas no olvides echar un vistazo al siguiente titulo, donde conocerás información importante sobre la diabetes.

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Qué es la diabetes mellitus

Existen tres tipos de diabetes: diabetes tipo 1, diabetes tipo 2 y gestacional. En la primera tu cuerpo no puede producir insulina, en la de tipo 2 no pueden producirla en cantidades suficientes o no es capaz de usarla de forma eficaz, ambas son crónicas y su tratamiento es para reducir y convivir con los síntomas. Por último la diabetes gestacional es la que aparece durante el embarazo y, si bien debe ser controlada durante el mismo, luego desaparece.

Las causas de la diabetes son diversas, puede ser hereditaria, provocada por factores ambientales, por un estilo de vida poco saludable, sobrepeso o insuficiencia a la insulina. También existen factores de riesgo como los antecedentes familiares, de diabetes gestacional, tensión arterial alta, niveles de colesterol altos, enfermedades cardiovasculares o sedentarismo.

La mejor forma de saber si tienes o no diabetes es conocer tus valores de glucosa en sangre acudiendo a una consulta médica. No olvides que el mejor tratamiento para la diabetes debe incluir comida para diabéticos, así como evitar los alimentos prohibidos para diabéticos, seguimiento de la insulina basal, controlar la glucosa alta, actividad física, control de la glucemia y por supuesto, el uso de los medicamentos recetados por tu médico.

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Síntomas de resistencia a la insulina

La resistencia a la insulina generalmente no causa síntomas, por lo que la mejor forma de saber si está presente o no es realizando la prueba de la tolerancia oral a la glucosa luego de ingerir 75 gr de líquido azucarado. Luego de dos horas podrás conocer el resultado: los niveles normales son inferiores a 140 mg/dl, entre 140 y 199 mg/gl significa que tienes resistencia a la insulina y cuando da números superiores a 200 mg/gl es signo de diabetes.

Sin embargo, a medida que la enfermedad avanza para convertirse en diabetes tipo 2, podrás comenzar a notar algunos síntomas como los siguientes.

• Altos niveles de azúcar en sangre. Que provocan sed excesiva, necesidad de orinar en exceso y aumento del hambre.
• Aumento de peso. Debido a las causas comentadas anteriormente, es posible que experimentes aumento de peso, aunque en otros casos también puedes perderlo sin explicación aparente.
• Cansancio. Acompañado de debilidad, fatiga y falta de energía a diario. La dificultad para concentrarte es otro síntoma relacionado a este cansancio.
• Hinchazón. Cuando la resistencia a la insulina es provocada por el exceso de consumo de hidratos de carbono notarás que tu abdomen está inflamado y también sufres síntomas como estreñimiento, diarrea, náuseas, vómitos y flatulencias.
• Aumento del colesterol. El exceso de colesterol malo y triglicéridos no sólo son unos de factores de riesgo de la resistencia a la insulina, sino que también posibles consecuencias de la misma.

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Tratamiento para la sensibilidad a la insulina

Si quieres evitar que la insuficiencia a la insulina se convierta en una diabetes debes actuar rápidamente para curarla, con cambios de hábitos en tu vida obtendrás excelentes resultados.

• Checa tus niveles de glucosa. Siempre junto con un médico cada 3 o 6 meses, según su recomendación.
• Ejercítate cotidianamente. Como mínimo 3 veces por semana durante 1 hora. Puedes hacer tu actividad física favorita, caminar, correr o hacer ejercicios aeróbicos.
• Pierde peso. Si tienes sobrepeso no hay nada mejor para tratar la resistencia a la insulina que una dieta para adelgazar.

Consejos y trucos para diabéticos

Conocer el tratamiento para la diabetes es algo que debes tener en cuenta si tienes síntomas de resistencia a la insulina como también los factores que pueden potenciar la aparición de esta enfermedad así como lo que debes conocer para prevenirla.

• Soluciones caseras. Existen remedios naturales como el yacón o el perejil o plantas como la ortiga y frutas cítricas. No olvides que también debes programas chequeos rutinarios, controlar tu nivel de glucosa en sangre (glicemia), dejar hábitos poco saludables como el cigarrillo y por supuesto llevar una dieta adeucada con alimentos para diabéticos.
• Sobrepeso y diabetes. Está comprobado que el peso de más y la diabetes están relacionados ya que ambos son factores de riesgo que se potencian. Además ambas aumentan las posibilidades de sufrir complicaciones cardíacas, neurológicas, dermatológicas, oculares y renales.
• Actividad física. No hay dudas de que ejercitarte te ayuda a mantenerte saludable, cuando sufres diabetes no es la excepción. Ayuda a bajar los niveles de glucemia y si lo haces con un seguimiento médico adecuado incluso puedes llegar a bajar la medicación.