Este problema comienza cuando la persona comienza a refregar y apretar sus dientes, tiene una mordida inadecuada y rechina su dentadura. De acuerdo a los especialistas, se trata de otro producto del estrés.
Todas las sustancias estimulantes, como la cafeína, el té, las bebidas cola o los chocolates provocan alteraciones emocionales y del sueño que desembocan en el bruxismo.
Los altos niveles de estrés relacionados con la vida agitada de las grandes ciudades se expresan en nuestro organismo a través de dolores de cabeza, alteraciones estomacales, molestias musculares y, además, consecuencias dentales.
Estos problemas generalmente pasan desapercibidos, porque las personas centran su atención en las afecciones que atacan a la cabeza, músculos o estómago. Sin embargo, los problemas dentales de este tipo pueden provocar graves consecuencias para nuestra salud.
Las ansiedades típicas del estrés pueden manifestarse en la cavidad bucal a través de herpes, aftas, candidiasis o bruxismo. Ésta última es la patología más consultada en los consultorios odontológicos en los últimos 15 años.
Las primeras consecuencias negativas del bruxismo sobre el organismo abarcan síntomas como dolores en el cuello, cabeza, columna vertebral, nuca y además en las articulaciones mandibulares. Esto lleva, con el tiempo, al desgaste de dientes y muelas.
1 Comentario en "Bruxismo: cuando el estrés llega a la boca"
hola quisiera saber como le ago o hacer tengo bruxismo estoy muy muy preocupado quisiera saber si alguien me ayudara que hacer o a donde ir