Establece exactamente tus ingresos mensuales habituales, es decir, que la cifra sea constante y en el tiempo, no cuentes los ingresos extras como entradas regulares.
Divide tus gastos en fijos y variables. Generalmente los fijos son los más onerosos, y por su condición de tal no pueden ser disminuídos. Estos son la hipoteca, el alquiler, el seguro del coche, etc.
Los gastos variables son los que puedes adaptar disminuyendo su importancia. Son gastos variables, los servicios, los gastos en supermercado, ropa, entretenimiento, etc.
Una vez que hayas identificado todos tus gastos los debes restar a tus ingresos totales.
Es conveniente que comiences colocando el ingreso y a continuación le restes los gastos variables totales. Ese resultado se llama "Resultado Bruto" o "Contribución Marginal".
Ingresos gastos variables = Contribución Marginal (CM)
A la CM puedes ahora restarle los gastos fijos donde finalmente te dará el resultado del período, que sería la cantidad de dinero que te queda tras haber afrontado todos tus gastos.
¿Porqué restar primero los gastos variables al ingreso? Simplemente porque cuanto más Contribución Marginal tengas, más sólida será tu economía en afrontar los gastos fijos, y de esta manera ya puedes controlar los variables previamente.
Si el dinero no te alcanza, tras haber realizado la deducción de tus gastos, puedes recortar los variables para afrontar con más soltura los fijos.
La meta también es que puedas tener un 10% de capacidad de ahorro de tus ingresos, de esta manera te cubres de cualquier situación eventual y puedes sostener con solidez tus finanzas personales.
1 Comentario en "Como hacer un presupuesto familiar"
me encanto este articulo fue genial