En general se suele pensar que este tipo de trastornos es característico de mujeres que son muy exigentes y perfeccionistas con su imagen corporal y que toman la delgadez como ideal de belleza. Pero, en realidad lo que demuestran las diferentes investigaciones realizadas al respecto, es que se trata de afecciones mucho más complejas.
La bulimia ha demostrado ser difícil de tratar únicamente con tratamientos psicológicos y se ha llegado a la conclusión de que hay diferentes factores que contribuyen a su desarrollo, como ser:
- Causas biológicas
- Tendencia genética
- Causas psicológicas
Al parecer, los investigadores han detectado que quienes sufren de bulimia poseen niveles muy bajos de neurotransmisores, especialmente de serotonina, una sustancia estrechamente ligada a la ansiedad y a la depresión. Para llegar a esta conclusión se han realizado estudios sobre el hipotálamo, en donde se encuentra el centro que regula el hambre y la saciedad.
Ambos aspectos están relacionados con la estimulación de diferentes zonas de esta zona del cerebro, si una de ellas se sobrestimula aparece en consecuencia un desajuste en el comportamiento de la persone frente a la comida. A estas alturas te preguntarás: ¿pero cómo actúa el triptófano en todo este proceso?
Beneficios terapéuticos del triptófano para la bulimia
Por si no lo sabías, el triptófano es un aminoácido esencial que ayuda a producir en el organismo sustancias muy importantes para su correcto funcionamiento, como lo son la serotonina y la niacina. Los niveles normales de triptófano ayudan a que la serotonina controle el apetito, ejerciendo un efecto ansiolítico y antidepresivo que contribuye a mantener el peso adecuado, no cayendo ni en el exceso de comer demasiado, ni en el de no comer nada.
Muchas veces, en el afán de mantener o conseguir la delgadez, puedes caer en el error de realizar una dieta muy estricta que puede desencadenar en un trastorno alimenticio como la bulimia nerviosa, sobre todo si eres del tipo de persona que le gusta comer mucho.
Pero, ¿qué dice la ciencia al respecto? En un estudio realizado recientemente sobre mujeres sanas sometidas a una dieta moderada durante 3 semanas, se constató que los niveles de triptófano bajaron y provocaron ciertos desórdenes emocionales pero sin graves consecuencias.
En cambio, en mujeres recuperadas con antecedentes de bulimia nerviosa, se encontró que el agotamiento de triptófano provocó un retorno temporal de síntomas depresivos, preocupaciones sobre el peso y el miedo a perder el control sobre la alimentación.
Finalmente, a la conclusión que se llegó fue que mantener los niveles adecuados y necesarios de triptófano en el organismo es de gran ayuda para evitar el desarrollo de trastornos alimenticios así como estados de ansiedad y depresión.
¿Quieres comenzar a consumir triptófano y no sabes dónde encontrarlo? Fíjate en los siguientes consejos.
Formas de consumir el triptófano
Lo puedes consumir en forma natural a través de los alimentos o en forma sintética a través de suplementos alimenticios.
Alimentos ricos en triptófano
- De origen animal: queso, pollo, huevos, pescados, leche, carne de pavo.
- De origen vegetal: nueces, mantequilla de maní, semillas de calabazas, semillas de ajonjolí, soya, tofu.
Suplementos alimenticios de triptófano
Generalmente los vas a encontrar presentados en tabletas, en cápsulas o en polvo. La dosis a consumir es la indicada en el prospecto.
No hay comentarios