Té y frutas: un mundo de sensaciones, de la mano de Liliana Moar

Liliana Moar es una de nuestras colaboradores más habituales en lo que a té respecta. Experta en blends y en recomendar lo que ella cree más adecuado para cada momento, ahora la especialista te va a comentar qué es lo mejor al momento de optar por un buen té frutado. ¡No te pierdas esta nota bajo ningún punto de vista!

-¿Eres partidaria de la mezcla de té y frutas en los blends? ¿Por qué crees que pueden llegar a funcionar bien?

-Sí. Con frutas, flores y especies pueden fusionar y un sin fín de mezclas. Desde ya, siempre según como se elija y usando las proporciones de los ingredientes indicadas. Así estas mezclas frutales pueden dar diversos efectos arómaticos, relajantes, depurativos, tonificantes...

-Cuéntanos cuáles son las combinaciones frutas y estilos de té que crees que tienen mayor potencial.

-Té verde con coco, vainilla y menta. El rooibos con naranja; el Earl Grey, que es un té negro con toques florales y lleva aceite de bergamota. El té verde me gusta también con algunos toques de cítricos y jazmín. Y desde ya, aquellos que incorporen cítricos en general, como la naranja o la mandarina, que van bien con su aporte de vitamina C. Otras frutas que me gustan mucho para los blends son el maracuyá y la rosa mosqueta.

-¿Conviene usar aceites esenciales o aromatizantes para potenciar un determinado perfil frutal?

-Sí. La forma de crear sabores y aromas es infinita, potenciando el uso de uno u otro de acuerdo al sabor que se quiera obtener. Es cuestión de buscar lo que a uno más le gusta.

-¿Qué tipo de combinaciones entre frutas y té crees que definitivamente no funcionan?

-Se pueden hacer blends frutales con todas las variedades de té. Lo que hay que tener en cuenta es como mezclar los componentes, que es el arte de mantener la armonía en sabor, aroma y cuerpo. Las frutas se dividen en grupos, uno de los consejos es mezclar sólo componentes de acuerdo a los grupos.

-Por último, aquí puedes añadir lo que consideres necesario.

-Me gustaría dejarles un perfil de frutas que les va a venir perfecto para lograr el efecto de sabor deseado.

• Ácidas: arándano, limón, piña, uva, maracuyá, pomelo, mora, kiwi y naranja.
• Semi-ácidas: frutilla, manzana verde, ciruela, granada, lima, durazno, mandarina, frambuesa y mango.
• Dulces: damasco, ciruelo, chirimoya, manzana, sandia, plátano, melón, uva, níspero, lúcuma, papaya, cereza, guayaba, papaya, higo y pera.
• Neutras: palta, maní, almendra, nuez, avellana y coco.