Qué es el mal de Chagas: contagio, síntomas y tratamiento

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¿Qué es el mal de Chagas?

La enfermedad de Chagas Mazza, es una parasitosis endémica en América, que debe su nombre a su descubridor Carlos Chagas, un infectólogo brasileño que la describió, allá por 1909. Años después, Salvador Mazza, un médico argentino, completó los estudios de Chagas en relación al parásito que la causa, el Trypanosoma cruzi. También pudo determinar que el mal de Chagas, una enfermedad que en general es crónica, se transmite, por la picadura de vinchuca.

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El mal de Chagas es contagioso

Una de las dudas más frecuentes es si el mal de Chagas es contagioso o no. En realidad, existen varias vías de contagio del Trypanosoma cruzi.

• Por picadura de vinchuca. Si bien es la forma más conocida y frecuente no es la única. Básicamente, consiste en que una vinchuca portadora del Trypanosoma cruzi, te puede picar, depositando el parásito al defecar. Tú te rascas y al rascarte te inoculas el Trypanosoma cruzi.
• De madre a hijo. Por otra parte, si eres mujer y quedas embarazada, puedes transmitirle el mal de Chagas a tu bebé, si tú ya padeces esta enfermedad.
• Por donantes infectados. Además, si recibes transfusiones o trasplantes de una persona infectada con mal de Chagas, también corres riesgo de contraer la enfermedad. Esto es menos frecuente porque en la actualidad se realizan controles para evitar esta fuente de contagio.
• Por consumir alimentos contaminados. En regiones donde vive el parásito, los insectos portadores pueden contaminar las comidas y bebidas que tú ingieres.
• Por accidente. Si eres un profesional de la salud y trabajas con muestras de laboratorio infectadas con el parásito, puedes accidentalmente, inocularte el mismo.

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¿Cómo prevenir el mal de Chagas?

En cualquier caso, es importante que sepas cómo prevenir el mal de Chagas. Una de las formas más efectivas de prevención de esta enfermedad es combatir las vinchucas. Para ello es necesario que tengas en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Mantén tu vivienda limpia y ordenada, para que las vinchucas no aniden en ella.
• Tapa las grietas de las paredes, ya que en ellas pueden anidar los insectos portadores del Trypanosoma cruzi.
• Construye los depósitos, gallineros, corrales y galpones, alejados de la vivienda.
• Mantén las habitaciones ventiladas, ya que las vinchucas son atraídas por el calor y las altas concentraciones de bióxido de carbono.
• Usa insecticidas, si vives en zonas de vinchucas para mantenerlas alejadas.

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Síntomas del mal de Chagas

En cuanto a los síntomas del mal de Chagas, debes saber que en la mayoría de los casos, ser portador de mal de Chagas no produce síntomas. De allí, que existe la posibilidad de que estés infectad@ y no lo sepas. Incluso en el 70% de los casos estar infectado con el Trypanosoma cruzi, no implica que vayas a sufrir la enfermedad. Por otra parte, aún si padeces la enfermedad, existe una fase que puede ser asintomática. Cuando el mal de Chagas se manifiesta puede presentar alguno de los síntomas siguientes, de acuerdo a la etapa en que se manifiesten.

• Inespecíficos como fiebre, fatiga, cansancio, mareos y desmayos, dolor de cabeza, irritabilidad o malestar general.
• Cardíacos como palpitaciones y dolor en el pecho.
• Digestivos como estreñimiento o diarrea, falta de apetito, dificultad para tragar y vómitos, entre otros.
• Localizados como el changoma de inoculación que es una lesión cutánea en la zona de picadura de la vinchuca o el signo de Romaña que es la hinchazón de los párpados que se produce en una gran parte de casos, cuando el parásito ingresa a ese nivel.

Ten en cuenta que el mal de Chagas puede tener consecuencias que afecten tu salud. De hecho, a largo plazo, puede causar problemas cardíacos o digestivos, en la medida que el parásito se aloja en el corazón y en el tracto digestivo del portador.

Las más frecuentes y también las más riesgosas son las cardíacas, en especial si afectan a niños. De allí la importancia de su diagnóstico y tratamiento temprano, antes de sufrir sus consecuencias más severas, que en casos extremos pueden ser incluso, causa de muerte.

¿Te preguntas si el mal de Chagas tiene cura? Pues bien, debes saber que en los últimos tiempos, se han abierto varias líneas de investigación en la búsqueda de una cura para el tratamiento de esta enfermedad. Por el momento, el tratamiento con antiparasitarios del mal de Chagas, cuando es detectado en fase aguda, permite tener el parásito a raya y evitar su desarrollo. Sin embargo, una vez que se instala en el corazón o en el sistema digestivo y se cronifica, resulta mucho más difícil presentarle batalla.

Chagas: tratamiento natural

Por último, si bien existen tratamientos convencionales muy efectivos en la etapa aguda, quizás te interese conocer otras alternativas para el tratamiento natural del mal de Chagas. A continuación, te comparto algunas de las más populares. En cualquier caso, consulta a tu médico y ten en cuenta que son coadyuvantes no sustitutos.

• Infusión de ajo y limón. Esta poderosa infusión tiene probadas propiedades antiparasitarias. Recuerda que el mal de Chagas es una parasitosis y como tal puedes detener su avance con productos antiparasitarios naturales como estos. ¡No dejes de probarlos!
• Aceite de orégano. Otro de los remedios caseros y naturales buenos para combatir los parásitos y por ende, el mal de Chagas es el aceite de orégano.
• Cúrcuma en todas sus formas. Por último, las propiedades antiparasitarias de la cúrcuma te irán de maravillas para evitar el avance del Trypanosoma cruzi. Si bien estos remedios naturales como la cúrcuma, no deben reemplazar las recomendaciones médicas una vez diagnosticada la enfermedad, pueden ser buenos paliativos para prevenirla si vives en regiones de riesgo.