Cómo se prepara la salsa de ajo
Si siempre has querido saber cómo hacer salsa de ajo para acompañar tus comidas, entonces has llegado al sitio indicado. Aquí encontrarás todo tipo de opciones que te van a ayudar a que tus platos sepan más ricos. El ajo es un vegetal maravilloso, el que hay que saber usar en su punto justo para no tapar todo. Y en salsas queda simplemente genial. Presta atención a las recetas que vienen a continuación.
Mayonesa de ajo
Si quieres saber cómo preparar salsa de ajo de la forma más tradicional posible, nada mejor que una mayonesa de ajo. Podría decirse que es bastante similar al alioli, pero no es exactamente la misma receta, puesto que lleva huevo y menos tiempo. ¡Sigue los pasos y la tendrás en tu mesa!
- Coloca un huevo dentro del vaso del mixer, robot de cocina o lo que tengas a mano. Añade una cucharadita de mostaza, una pizca de sal y también un diente de ajo. Procesa un poco para integrar.
- Continúa procesando a velocidad media, mientras vas añadiendo aceite en forma de hilo. Puedes usar girasol u oliva. Sigue añadiendo mientras vas removiendo y batiendo. Cuando esta receta de salsa de ajo quede con la consistencia de una mayonesa, estará lista. Condimenta con pimienta y un toque de zumo de limón.
Salsa de ajo y perejil
Si quieres preparar una salsa de ajo y perejil, puedes seguir al menos dos variantes completamente sencilla. Una vez una mayonesa con ajo y perejil, que es similar a la receta anterior. La otra, es un aceite, siendo ideal para aderezar carnes y demás. Atención con ambas recetas.
- Para preparar salsa de ajo y perejil con mayonesa, simplemente le añades un manojito de perejil a la receta anterior, al mismo tiempo que agregas el ajo. Te quedará una riquísima mayonesa provenzal.
- En cambio, si quieres hacer un aceite de ajo y perejil, pica muy finamente a cuchillo cantidad necesaria de ajo y perejil. Añade esto a una taza o recipiente con aceite. Condimenta con sal y pimienta y deja reposar un par de horas antes de usar. Es ideal para pintar carnes cuando se están cociendo.
Salsa al ajillo
La salsa al ajillo es una tradicional salsa de ajo para carnes de todo tipo, que generalmente tiene tan sólo dos ingredientes: ajo y aceite. El tema está en saber calcular bien los momentos en los cuales se introduce el ajo para que no se queme en demasía. ¡Presta atención!
- Toma una sartén y cocina allí el pescado, pollo o trozo de carne que quieras comer al ajillo hasta que esté a punto. Mientras están reposando sus jugos, sobre ese mismo fondo de cocción, añade un chorrito de aceite de oliva y dos buenos dientes de ajo picadísimos.
- Remueve bien para que no se queme y sirve sobre la carne. Condimenta con sal y pimienta y, si lo deseas, también puedes añadir una nuez de manteca por encima para dar más untuosidad. También se puede desglasar con un chorro de vino blanco antes de apagar el fuego. Es una salsa de ajo y aceite rica y efectiva, además de rápida y fácil.
Crema de ajo
¿Andas buscando cómo hacer crema de ajo para acompañar un plato de pastas o alguna carne delicada? Pues entonces no tienes más que prestar atención a esta riquísima receta.
- Toma una cabeza de ajo, pártela a la mitad, y cocínala envuelta en un papel de aluminio con aceite de oliva, sal y hierbas en el horno. Debes hacerlo hasta que el ajo esté tierno. Aprieta bien el contenido de los ajos y extrae su pasta.
- Toma una cacerola, pon a calentar un poco de nata de leche, añade la pasta de ajos, sal, pimienta y algunas hierbas como tomillo o salvia. Deja que se integren los sabores y ya tendrás tu crema de ajos lista para usar.
Mayonesa de ajo negro
Esta receta de mayonesa de ajo negro no es ni más ni menos que mayonesa de ajo en licuadora, que cambia el ajo tradicional por ajo negro. Lleva un huevo, 200 ml de aceite de oliva y un diente de ajo negro. Se prepara igual que la primera mayonesa que conociste en este artículo. Así de simple: ya sabes cómo hacer salsa de ajo con mayonesa, en este caso en versión negra. O gris al menos. También puedes preparar un riquísimo alioli de ajo negro.
Salsa árabe de ajo
La salsa árabe de ajo es muy sencilla de preparar y simplemente consiste en procesar el ajo con aceite y limón hasta formar una pasta. No tan distinta a la salsa de alioli. Algunos también la mezclan con un poco de yogur natural o labne para que quede más fresca. Es riquísima y, desde luego, sirve para acompañar también comidas no orientales.
Con qué usar la salsa de ajo
Has visto que los ingredientes para salsa de ajo se pueden combinar bastante bien con alimentos de toda clase. Es que, afortunadamente, es una salsa muy versátil y que puede darle un toque de distinción y sabor a tus platos.
- Carnes de todo tipo. Pollo, carne de ternera asada, algunos pescados, mariscos y también otros cortes como algunos de cerdo de larga cocción se pueden llevar perfecto con cualquiera de las salsas de ajo que aprendiste a hacer en esta nota.
- Vegetales grillados. Un aderezo de ajo le dará un sabor increíble a tus vegetales grillados. Puedes usar desde una simple mayonesa de ajo, al aceite de ajo y perejil para ir dándoles un toque particular mientras los vas cocinando.
- Sandwiches y bocadillos. Una rica mayonesa de ajo levanta muchísimos bocadillos sencillos y sin mucha gracia. Puedes usarlo con quesos, embutidos, vegetales, carnes asadas y un largo etcétera.
- Aliños de ensalada. Prueba a mezclar una cucharada de mayonesa de ajo con tu aliño en algunas ensaladas. Verás qué bien que queda.
Otras salsas que puedes hacer en casa
Ya sabes muy bien cómo hacer aderezo de ajo en diferentes estilos. ¿Por qué no probar con otras deliciosas salsas que pueden dejar tus platos con un sabor maravilloso?
- Salsa bechamel. Una de las recetas más tradicionales de salsas que existen. Y una salsa que sirve de punto de partida para muchas otras más. Por eso es esencial saber prepararla.
- Salsa rosa. La salsa golf es una mezcla de mayonesa y ketchup, pero con sus misterios particulares. Descúbrelos y aliña tus carnes y mariscos con ella.
- Salsa de 4 quesos. La salsa de 4 quesos suele ser la combinación de quesos de diferentes sabores y texturas, con bechamel o crema. Y se emplea en pastas, carnes y mucho más. Un clásico que gusta a niños y grandes.
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