Efectos del té sobre el HIV

Muchas son las propiedades medicinales del té que se conocen y muchas quizás son las que aún faltan para descubrir. Es que esta bebida presente en la mayoría de los hogares, encierra una fuente inagotable de beneficios curativos para la salud y bienestar del organismo. Tal es el caso de la posibilidad que se abre de que el té verde sirva para ayudar en los tratamientos contra el HIV, una enfermedad que posee connotaciones graves ya que puede producir la muerte. ¿Piensas qué esto pueda ser posible?

Si bien los estudios que se han realizado son más bien preliminares y no puede afirmarse a ciencia cierta, los resultados obtenidos por una investigación hecha en 2003 por la Universidad de Tokyo dicen que el galato de epigalocatequina, uno de los compuestos de los polifenoles del té verde, podría tener incidencia en el avance del virus del HIV.

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Estudios sobre el HIV: el té verde podría inhibir el avance del virus

Si bien hasta el momento se sospechaba que las catequinas del té tenían un efecto protector contra la infección del HIV, esta nueva investigación abre un interesante abanico de posibilidades para tratar de luchar contra esta enfermedad.

A este estudio se le suma otro realizado en el año 2005, en el Instituto de Investigación del Centro de Sangre de Nueva York, en el que se descubrió que varios polifenoles del té pueden inhibir el HIV a través de múltiples mecanismos de acción.

Los resultados que brindó este estudio indican que el té, especialmente las variedadades de té negro y de té verde, pueden ser utilizadas como fuente de agentes anti-VIH.

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Teaflavina, la sustancia responsable de la acción del té verde sobre el HIV

Los derivados de la teaflavina, que es un tipo de antioxidante, serían los responsables de que el té se pueda aplicar para frenar el desarrollo de HIV ya que actuarían como inhibidores de la entrada del virus a las células sanas del cuerpo evitando de esta manera el contagio de las mismas y la reproducción del virus.

De este modo, un producto natural y de consumo masivo como lo es el té le haría frente a una epidemia de dimensiones importantes como lo es el HIV, que produce un deterioro significativo del estado general del cuerpo como también puede causar la muerte.

De todas formas, es prematuro hablar de algo determinante hasta que no se hayan efectuado avances importantes. Se necesitan realizar más estudios para afirmar verdaderamente que cualquiera de las variedades de té provenientes de la planta Camelia Sinensis puede efectivamente utilizarse como tratamiento en la lucha contra el HIV.

Mientras tanto, es factible que a futuro se pueda añadir una importantísima propiedad a una bebida de consumo popular como lo es el té, que ya está convirtiéndose en algo así como una "poción mágica".