Cómo convertirse poco a poco en un experto en té

El conocimiento sobre el té, sus propiedades y su cultura, viene de la experiencia y de la investigación. Pero si ambas búsquedas no están orientadas, puede pasar demasiado tiempo hasta que puedas convertirte en un experto en el té. Para encaminar mejor tus ansias de conocimiento, sigue estas recomendaciones.

• Aprende a diferenciar las variedades. Para empezar, debes comenzar por interiorizarte en las variedades, distinguirlas entre sí y luego ir a los tipos más específicos. No basta con distinguir un té rojo de un té verde, sino que tienes que ser más fino y diferenciar un gyokuro de un bancha, por poner un ejemplo.
• Prepara el té siguiendo los parámetros que indican los que saben. Si los expertos recomiendan preparar determinado té verde con el agua a 70° y dos minutos de reposo, es porque se han tomado el trabajo de investigar que con esas coordenadas es como se obtiene lo mejor de dicha variedad.
• Conoce y prueba todo el té que puedas. No hay mejor manera de ir desarrollando el paladar y afinándolo que probando todo el té posible. Compra diferentes variedades, prueba con blends, permanece atento a las recomendaciones que recibas, intenta conseguir tés de diferentes procedencias y así vas a ir creciendo en conocimiento mediante la experiencia.
• Lee mucho sobre el tema. La lectura es conocimiento, no tengas la menor de las dudas. Por eso mismo, no dejes de leer todo lo posible sobre té que encuentres. Hay excelentes fuentes en Internet y, desde ya, muchísimos libros. Aprende sobre su sabor, sobre su cultura, sus propiedades, su historia... Es un mundo tan fascinante que, gracias al té, conocerás geografía, física, química y hasta agricultura.
• Estudia alguna carrera relacionada. Actualmente puedes estudiar para ser sommelier, para hacer tea blending, para protocolo y ceremonia del té y sobre muchas otras cuestiones específicas que te permitirán seguir desarrollando tus conocimientos. Existen cursos cortos, seminarios, charlas... Es cuestión de ver qué tienes disponible en tu ciudad o en tu país y probar.
• Si puedes, anímate con algún viaje. Viajar es abrir los sentidos y mucho más si en dicho viaje le dedicas un espacio al té. Por ejemplo, El Club del Té ofrece una ruta del té en Argentina. También existen tours planeados para conocer las mejores plantaciones de té en China, Japón o la India. Y así, en cada sitio que estés puedes aprender mucho más sobre este tema.
• Confía en tu gusto. Una vez que ya te hayas establecido, no necesitarás que te digan qué té es bueno o qué te no lo es tanto. Ya tendrás tu propio gusto formado y estarás en condiciones de poder recomendar tú y sorprender así a amigos, familiares y, por qué no, al público general con tus conocimientos.

Desde ya, estos son tan sólo algunos trucos y consejos que te van a llevar a ser un conocedor más avezado acerca de esta notable infusión. Obviamente, de ti dependerá seguir creciendo en tus conocimientos sobre el té.