El jengibre, un potente remedio para tratar el cáncer de ovario

El jengibre es desde la antigüedad uno de los ingredientes más utilizados como remedio natural para curar muchas dolencias. Además, de su ya ponderado valor gastronómico, también tiene gran valor medicinal. ¿Lo sabías?

Según los relatos históricos, originalmente, el jengibre comenzó a ser utilizado en China, para luego hacerse conocido en diferentes latitudes.

Actualmente, se cultiva en diferentes partes del mundo, sobre todo en África y el Caribe.

Es que el jengibre, además, de poseer un exquisito y sofisticado sabor, tiene un rico caudal de nutrientes esenciales y compuestos que colaboran en el rejuvenecimiento integral del organismo.

Es muy común y de conocimiento popular que el jengibre es muy bueno para tratar malestares estomacales y otras afecciones menores. Pero, quizás desconozcas que sus beneficios para la salud también incluyen la lucha contra el cáncer.

Por esta razón, es que muchas ramas de la medicina natural, como la fitoterapia, la aromaterapia, ayurveda y la naturopatía, lo utilizan como uno de sus principales remedios.

¿Quieres conocer cuáles son los principios orgánicos que hacen del jengibre un alimento tan especial? Toma nota…

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Componentes del jengibre

• Hidratos de carbono
• Aminoácidos
• Grasas
• Fibra
• Vitamina C y niacina
• Minerales: aluminio, boro, cromo, cobalto, manganeso, fósforo, silicio, cinc.
• Flavonoides
• Ácido oxálico
• Curcumina
• Shogaholes
• Gingeroles
• Aceites esenciales

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Poder anticancerígeno del jengibre

Desde siempre, el jengibre se ha utilizado para combatir las náuseas, mareos, vómitos y malestares estomacales, pero recientemente se ha descubierto que es capaz de combatir el cáncer. ¿Qué te parece?

Estudio científico sobre beneficios del jengibre para el cáncer

Para probar esta propiedad, se realizó una investigación con ratones portadores de tumores. Mediante los resultados obtenidos, los científicos descubrieron que el jengibre puede eliminar células cancerosas de dos maneras diferentes.

1. Por apoptosis: el jengibre puede lograr que las células cancerosas se destruyan entre sí, dejando las células sanas circundantes intactas.

   Además, las propiedades antiinflamatorias del jengibre pueden prevenir el desarrollo de tumores.

2. La segunda forma, es la autofagia: el jengibre estimula a que las células cancerosas se coman a sí mismas.

Los investigadores se encuentran estudiando uno de los cánceres más difíciles de combatir, el cáncer de ovario.

Al parecer, la quimioterapia cuando se realiza repetidamente, puede perder su efectividad con el tiempo. El problema radica en que el cáncer elabora una resistencia al tratamiento repetitivo.

Por esta razón, se piensa que el jengibre puede ser de gran ayuda, ya que al funcionar de dos maneras diferentes, ayudaría a disuadir la resistencia del cáncer. Una gran noticia, ¿no te parece?

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Estudio científico sobre el jengibre y el cáncer de ovario

Los científicos reconocen que el jengibre es un componente de la dieta natural con grandes propiedades antioxidantes y anticancerígenas. Estas propiedades recaen en uno de sus componentes, el gingerol.

Para probar estos efectos curativos para con el cáncer, los investigadores han realizado cultivo de células de cáncer de ovario, a las cuales han sometido a los componentes del jengibre.

Resultados obtenidos

El tratamiento de jengibre inhibió el crecimiento de las células cancerosas de ovario. Se ha encontrado que el shogaol es el más activo de los componentes probados.

Conclusión

El jengibre inhibe el crecimiento de células de cáncer de ovario. El uso de este en la dieta diaria puede ser un potencial tratamiento para prevenir y curar este tipo de cáncer.

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Cómo consumir el jengibre

Tienes varias formas de hacerlo:

• La raíz cruda en ensaladas, o como especie aromática de diferentes platos.
• La raíz cocida en salsas.
• La raíz pulverizada en cápsulas: 2 gramos al día como máximo.
• En extracto seco: 400 miligramos diarios, repartidos en tres tomas.