Cada vez son más los estudios que apuntan a la altísima incidencia que el estado emocional de los trabajadores tiene sobre el nivel de resultados y capacidad en las empresas, por lo que la denominada inteligencia emocional cobra, cada vez más, un papel primordial en las estrategias empresariales.
La tradicional separación entre el plano emocional y el laboral ha pasado ya a mejor vida: cada vez es más patente el importantísimo papel que juegan en la vida laboral, los factores afectivos y emocionales, más aún si tenemos en cuenta el considerable aumento de la incidencia de trastornos mentales y emocionales en nuestra sociedad, hasta el punto de que males como la depresión o la ansiedad constituyen ya uno de los más frecuentes motivos de baja por enfermedad.
No hay que confundirse: todo concepto llevado al extremo no sólo pierde su eficacia, sino que puede incluso volverse en contra. En este contexto, la incorporación de valores emocionales en el desempeño del trabajo debe regirse por una serie de parámetros razonables. El cambio en el formato de las comunicaciones en aras de una mayor inmediatez ofrecen aspectos negativos evidentes: los mensajes de correo electrónico y los programas de mensajería instantánea como el MSN Messenger pueden resultar peligrosos, por cuanto que su contenido eliminan factores tan determinantes para su interpretación emocional como los gestos, la entonación o el lenguaje corporal en general.
Es conveniente, cuando se inicia una comunicación, valorar si el componente emocional puede ser importante, en cuyo caso es preferible emprender la vía presencial o directa. La construcción de un espacio acogedor, cálido y relajante entendido desde el punto de vista arquitectónico y decorativo- también cobra una relevancia fundamental para el bienestar emocional del trabajador.
Impulsar la profusión, en su justa medida, tanto de espacios como de momentos y situaciones que favorezcan el contacto personal entre los empleados es un incentivo también fundamental que redunda en un ambiente favorable desde el punto de vista emocional, factor éste clave para conseguir un funcionamiento óptimo en el plano laboral.
No hay comentarios