Nuestras actividades diarias se desempeñan mayormente ?bajo techo? y ?entre paredes? en espacios construidos con diversos materiales a lo que hay que sumar las radiaciones solares y magnéticas, la energía generada por el continuo movimiento geológico sobre y bajo la tierra y la cantidad de aparatos tecnológicos y decorativos que le agregamos.
El Dr. Hartmann, realizo estudios que han demostrado que existe una relación directa entre nuestra salud y el lugar donde vivimos, trabajamos y dormimos; determinó que existen líneas energéticas que emanan del subsuelo y forman una especie de red invisible conocida como ?Red Hartmann?, la cual se puede detectar a más de 2.000 metros de altura y afecta tanto a espacios exteriores como interiores, su densidad e intensidad suelen ser variables, se repiten cada 2 ó 2,5 metros. Interesante saber que lo peligroso es estar en sus puntos de intersección y peor aún si estos coinciden con postes de alumbrado, transformadores o venas de aguas subterráneas, entre otras.
¿Cómo saber si vivimos en un espacio sano?
Lo recomendable es hacer un estudio de Feng Shui y de Radiestesia, por profesionales los cuales determinarán esas condiciones.
Por ahora les invito a observar las siguientes anomalías en sus espacios que les pudieran estar afectando:
- Grietas, olores y humedad,
- Cuidar la ubicación de nuestras camas, las cuales deben estar aisladas de cualquier tipo de radiación (celulares, teléfonos, computadores, etc., a su cabecera), personalmente recomiendo no tener la Tele en el dormitorio.
- Nuestros ambientes también respiran es por ello que se recomienda ventilarlos diariamente para mantener el aire libre de impurezas, evite fumar, y los cambios bruscos de temperaturas internas, limpie y cuide sus sistemas de calefacción.
- Las flores y plantas, además de decorar son una buena fuente de oxígeno para nuestros espacios, no recomiendo las artificiales y mucho menos las ?secas?.
Cada vez más, nuestras viviendas se construyen de forma masiva y sin prestar atención a variables como el emplazamiento, los materiales, el aislamiento, la orientación, los niveles de confort térmico, calidad del aire, humedad relativa, las radiaciones eléctricas, etc. No es raro ver el mismo edificio repetido en distintos lugares de la ciudad, les ha pasado?.
Tengamos en cuenta el entorno a la hora de seleccionar nuestro lugar de vivienda o trabajo, ser dedicados al equiparlos y decorarlos. Propiciemos lugares sanos, busquemos el equilibrio entre nosotros y nuestros espacios.
Que sea para su mayor beneficio
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