La calabaza es un vegetal muy dúctil en materia culinaria. Puedes optar por cualquier variante a la hora de cocinarla. Eso sí, debes tener en cuenta si se trata de una calabaza de invierno o de verano. De esto depende cual será la manera más apropiada de preparación.
Por empezar, a las calabazas de verano conviene secarlas un poco. Es que suelen ser muy aguachentas y pueden humedecer demasiado tu preparación. Por otra parte, son las más aptas para consumir crudas.
A las calabazas de invierno, en cambio, no hace falta secarlas. Pero sí retirarle su gruesa piel. Estas son ideales para rellenar con alguna creación de tu autoría o también para hacerla cocida, rehogada o gratinada.
Una de las variantes más comunes al momento de emplear las calabazas es en guisados y potajes. Son ideales para suavizarlos y darle un sabor más dulzón a la preparación. También existen calabazas llamadas "confiteras" que son ideales para realizar galletas, pasteles y otros panificados o postres.
2 Comentarios en "Cómo cocinar las calabazas"
si....! para nada
Bastante bien pues no sabía lo del invierno y verano