Tauro y la salud: descubre de qué enfermedades y debilidades debes cuidarte

Las zonas vulnerables y principales de los nativos de Tauro rigen mayormente en la cabeza e incluye: la garganta, el cuello, las vértebras cervicales, el cerebelo, las orejas, la laringe y faringe, la mandíbula inferior, las amígdalas y la glándula tiroides.

Es por ello, que como nativo de Tauro, puedes llegar a ser más propenso a sufrir afecciones en estas zonas del cuerpo. Es más común que sufras de gripes, resfríos y dolores de garganta así como disfunciones en la glándula tiroides (hipotiroidismo o hipertiroidismo.

Para las gripes, resfríos e infecciones de garganta te recomiendo:

• Consumir alimentos con alto contenido de Vitamina C (tomate, naranja, mandarina, kiwi). Esta vitamina mantiene altas tus defensas y aumenta la protección de tu sistema inmunológico.
• En días fríos, proteger la zona de la garganta. De esta forma evitarás afecciones como laringitis y faringitis
• No fumar. El consumo de tabaco, aumenta la vulnerabilidad de la garganta y pulmones.

Para los problemas en la glándula tiroides, puedes hacer un chequeo médico anual e integral y de esa forma hacer un seguimiento de su funcionamiento, para detectar tempranamente si es que existe alguna anomalía en particular. También es recomendable que consumas buenas cantidades de yodo (elemento se encuentra en los mariscos, crustáceos y en la sal yodada).

Por otro lado, existe una cierta tendencia en tu signo, a sufrir sobrepeso. Esto se debe a que, como taurino, sientes gran atracción por la comida y la bebida que, sumado a los problemas de tiroides, puedes inclinarte a subir de peso de forma muy acelerada.

Como ya se sabe, el sobrepeso, acarrea otras dolencias de tipo más grave, sobre todo, las relacionadas al sistema cardiovascular (problemas circulatorios, várices, dolencias cardíacas, etc)

Para evitar el sobrepeso y consiguientes afecciones, debes establecer una rutina de ejercicio, diario o al menos semanal. Como nativo de Tauro (signo de naturaleza fija y pasiva), tienes que luchar contra el letargo y sedentarismo. También la alimentación sana es un pilar fundamental de tu salud.

• Evitar los alimentos industrializados o muy procesados. Dichos alimentos suelen tener excedentes de azúcar y sodio que son muy perjudiciales para tu salud.
• Los alimentos que debes consumir preferentemente son: cereales como el trigo, el maíz, la cebada, el arroz y la avena. Jugos de frutas, legumbres, pastas y plantas aromáticas como el perejil, el estragón, el tomillo y la cebolleta.