En la dieta habitual, el mineral mercurio suele aparecer especialmente el pescado. Para algunas personas, el lugar de trabajo también puede ser una fuente importante de exposición a este mineral. También puedes recibir dosis extra de mercurio en situaciones concretas, usando cremas para aclarar la piel, jabones o medicamentos que contienen compuestos de esta sustancia.
Estas formas tienen riesgo de toxicidad y consecuencias sobre los sistemas nervioso e inmunitario, el aparato digestivo, la piel y los pulmones riñones y ojos.
El mercurio que hay en la corteza terrestre de forma natural, viene de la actividad volcánica, la erosión de las rocas o la actividad humana. Con referencia a esta última la principal causa de sus emisiones, proceden principalmente de la combustión de carbón en centrales eléctricas, calefacciones y cocinas, procesos industriales, incineración de residuos y de la extracción minera de mercurio y otros metales.
Es un veneno peligroso que destruye las células nerviosas y es especialmente peligroso para el feto porque puede provocarle alguna minusvalía.
Las pequeñas concentraciones de mercurio que se encuentran de manera natural en el agua de mar no suponen ningún problema en sí mismas y, tampoco puedes hacer nada, ya que se trata de un hecho natural unido a la actividad volcánica.
Lo que pasa es que el pez que toma una pequeña cantidad de mercurio al comer algas y plancton, acumula mercurio en su cuerpo. Y los peces grandes, consumen peces más pequeños, pasando por lo mismo. El mercurio se va concentrando poco a poco en cada eslabón de la cadena alimentaria y algunos peces por sus características lo contienen en mayor dosis como el atún, el pez espada, la lubina o el tiburón. El mercurio, se concentra en el fondo del mar.
Comer pescado en la dieta y el mercurio
Por suerte tu cuerpo elimina el mercurio de manera natural. Si analizas tus uñas, cabellos y orina, descubrirás que contienen pequeñas cantidades de mercurio. Aunque, para sufrir una intoxicación de mercurio provocada por el pescado deberías tomar mucho más pescado de lo normal y además comer sólo a los grandes peces que se han mencionado anteriormente.
Si el consumo de pescado es sensato, tres o cuatro veces a la semana y combinando con pescado azul, tendrás innumerables beneficios para tu salud y sin ningún riesgo. Dejar de comer pescado por miedo al envenenamiento del mercurio es absurdo. Salvo en caso de embarazo en que sí conviene tomar precauciones.
Hay quienes para evitar correr riesgos con el mercurio, comen solo pescado azul, pero eso es un error ya que, aunque los peces pequeños contienen menos mercurio, contienen otro problemático contaminante de productos químicos que se han fabricado durante mucho tiempo antes de prohibirse su comercialización y utilización.
Para que no haya riesgo de intoxicación con mercurio o PCB y obtener todos los beneficios del pescado, debes comerlos de todo tipo y de manera habitual. No tengas miedo al mercurio ni al pescado; al contrario, goza de sus beneficios y de los placeres de una buena dieta variada con productos naturales.
1 Comentario en "Contraindicaciones del mercurio en los pescados"
El omega 3 y su ingesta diaria, puede repercutir en el potasio en la sangre elevada?