Propiedades de la leche de girasol

Aquellas personas que sufren de intolerancia a la lactosa tienen que recurrir a otra clase de productos para poder cubrir sus necesidades de consumir una bebida de similares características y que, además, le ofrezca buenas propiedades.

Una gran opción, por supuesto, es recurrir a las leches vegetales. No sólo son perfectamente aptas para la intolerancia a la lactosa, sino que además son muy ricas en nutrientes de toda clase. No tienes más que probar con alguna de ellas y verás cómo las adoptas sin problemas, ya que además son ricas de sabor. ¿Te gustaría comenzar con esta leche de girasol?

Ingredientes:

• Una taza de semillas o pipas de girasol peladas
• Tres tazas de agua mineral
• Una pizca de sal
• Azúcar, miel o endulzante permitido (opcional)
• Gotas de esencia de vainilla (opcional)
• Una pizca de canela (opcional)

Preparación:

Coloca las semillas de girasol en remojo durante aproximadamente dos horas. Escúrrelas y colócalas en el vaso de una batidora, donde añadirás el agua mineral y una pizca de sal. Hasta aquí, es el paso necesario para cualquiera de las dos versiones, la dulce y la salada.

Procesa la mezcla hasta que se forme una bebida bien homogénea, con color de una leche vegetal. Cuela la preparación en un colador bien fino, reservando el líquido y guardando la pulpa para preparar algún relleno o un delicioso queso de girasol.

Si quieres hacerla dulce, añádele vainilla, canela y, por supuesto, el endulzante que hayas escogido. Así, ya tendrás una deliciosa leche de girasol lista para ser consumida. Esta leche es rica en potasio, magnesio, ácidos grasos de calidad, proteínas, calcio, fósforo y vitamina E. Además, es completamente natural.

Por supuesto, también puedes tener en cuenta otras opciones tales como la leche de almendras o la de avena, entre muchas otras del reino vegetal, que son completamente libres de lactosa.