Secretos de la pintura con cerillas

Entre los usos alternativos de las ceras de colores, los más conocidos se relacionan con sus propiedades enmascaradoras, al combinarse con técnicas de pintura al agua.

Sin embargo, también podrás obtener resultados asombrosos, si expones las superficies pintadas con ceras, a altas temperaturas, para que se fundan y entremezclen.
Procedimiento:

1. Coloca sobre la mesa un buen colchón de papeles de diario.
2. Sobre estos apoya una hoja de papel absorbente.
3. En tercer lugar ubica el soporte pintado con ceras, cara para abajo.
4. Coloca un segundo colchón de hojas de diario y un paño de algodón sobre el que puedas apoyar la plancha caliente.
5. Apoya la plancha que deberá estar a una temperatura media y déjala unos segundos en contacto.

El colchón de papel de diario es para preservar las superficies, ya que la cera al calentarse, atraviesa fácilmente el soporte.

Otro modo de lograr efectos aleatorios, muy atractivos, aprovechando los trozos pequeños de cerillas, que ya no puedes utilizar para pintar, es el siguiente:

1. Coloca los trozos de cerillas en un rallador que destines a ese fin. Son ideales los de manija, de uso doméstico, que permiten rallar restos, que no podrías asir entre tus dedos.
2. Esparce el rallado de cera, del mismo o de diferentes colores sobre el soporte (tela, cartón, papel) elegido, que habrás colocado sobre un colchón de diarios, como en el caso anterior, pero esta vez, cara para arriba.
3. Cubre con una hoja del mismo tamaño de papel absorbente
4. Por último, coloca el segundo colchón de papel de diario y apoya la plancha, en toda la superficie para que el granulado de cera se funda y entremezcle.

Puedes usar esta base, en combinación con otras técnicas, a partir de lo que te sugieran, los colores y formas logrados.