La meditación ayuda a controlar el estrés

La meditación es una disciplina oriental que ha tenido a través del tiempo gran aceptación en el mundo occidental. Son muchos beneficios que reporta la práctica de esta disciplina milenaria, mucha gente la utilizan para lograr un bienestar integral, logrando una armonización en el plano emocional, psicológico y físico. Si te interesan este tipo de disciplinas, sigue leyendo el artículo y conocerás los nuevos beneficios que se le adjudican.

La meditación también tiene la facultad de reducir el estrés, lo cual resulta muy beneficioso para personas que sufren de hipertensión y problemas cardíacos. Es lo que demuestran dos estudios médicos recientes, uno realizado en la Universidad de Maharishi, en Estados Unidos por Sanford Nidich, y el otro dirigido por Robert Schneider de la Universidad de Wisconsin.

En el primer estudio se dividió a 298 estudiantes universitarios menores de 26 años en 2 grupos: uno aprendió la técnica de la meditación, mientras que el otro sirvió como punto de comparación.

¿Cuáles fueron los resultados de este primer estudio?

A los tres meses se pudo comprobar que los estudiantes que habían practicado la meditación registraron un descenso de la presión arterial, mientras que los del grupo de control sufrieron un aumento, quizás por la llegada del período de exámenes. Además, los estudiantes que meditaban mostraron una reducción de las alteraciones del estado anímico, la ansiedad y la depresión.

Por otro lado, en la investigación realizada en Wisconsin, llevada a cabo con hombres y mujeres durante más de 9 años, demostró que los pacientes con enfermedad cardíaca que practicaban la meditación padecieron un 50% menos de infartos cardíacos y cerebrales. Este es el primer estudio a largo plazo que demuestra que existe una relación entre la meditación la reducción del estrés y la incidencia menor en enfermedades cardiovasculares.

Si no eres aún practicante de esta técnica pero quieres comenzar a realizarla, puedes comenzar por unos sencillos pasos de relajación que te ayudarán a sentirte más tranquilo y en armonía. Sólo tienes que seguir estas indicaciones:

1. Acuéstate en una superficie plana.
2. Coloca una mano sobre el estómago, justo encima del ombligo y la otra mano sobre el pecho.
3. Respira lentamente y trata de elevar un poco el estómago.
4. Aguanta por un segundo la respiración.
5. Bota el aire lentamente y deja que tu estómago baje otra vez.
6. Repite los puntos 2, 3 y 4 varias veces hasta que te sientas sereno.

Muchos son los beneficios que puede reportarte la práctica asidua de esta técnica milenaria, sólo requiere de 15 ó 20 minutos para comenzar a familiarizarte con ella y obtener sus beneficios terapeúticos.