Ser musulmán no sólo es una religión sino una forma de vida, y esto se ve reflejado hasta en la forma de preparar las bebidas y las comidas. Cada elemento de la naturaleza tiene su significado especial y es importante, como por ejemplo el agua.
El agua purifica tanto el físico como el alma del hombre y por ello es tan importante que esta tenga un cuidado especial, incluso si se la consume para preparar el té o shay en Al-Ándalus.
En el Al-Ándalus, el agua es especialmente buena y natural, ya que proviene de las Sierras Nevadas. Incluso muchas de las canalizaciones existentes en la zona de Granada fueron construidas en al época de la dominación musulmana. Lo que garantiza que el agua para preparar el té Al-Ándalus sea buena tanto para dar un sabor especial al shay, como para purificar el ser interior.
En otras épocas esta agua era bebida sola, como agua de rosas o naranja, para preparar limonada o té de mezclas de finas hierbas como té negro, cardamomo, canela y jengibre o Assam, té verde, jengibre, hibisco y canela.
Hoy día se desea preservar la tradición de los tés de Al-Ándalus, y para ello, es fundamental entender que para que exista un buen té o shay, es necesario darle importancia al agua para su preparación, y que a través de ella se otorga vida y energía tanto para el cuerpo, como para el espíritu.
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