Qué es el reflujo gástrico
El reflujo gastroesofágico es un problema muy común que consiste en el retorno del contenido del estómago al esófago y la boca, provocando dolor, ardor, inflamación y sensación de acidez.
El esófago es un tubo muscular que forma parte de tu sistema digestivo, su función es transportar la comida y los líquidos que ingieres de la boca al estómago. Cuando el músculo esfínter esofágico inferior, ubicado al final del esófago no se cierra correctamente, permitiendo que el contenido del estómago vuelva, es decir que se produce el reflujo.
El reflujo en bebés generalmente se presenta porque su esfínter esofágico no se desarrrolló por completo, sin embargo cuando este problema se extiende durante más de un año podría tratarse de enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), lo que es más grave y debe ser tratado de forma especial. En los adultos el reflujo gástrico es una respuesta de tu organismo a los excesos en la comida, los platos condimentados, grasosos o ácidos, bebidas alcohólicas y tabaco e incluso algunos medicamentos aunque también puede ser síntoma de ERGE.
Síntomas del reflujo
Es sencillo reconocer el reflujo gastroesofágico por sus síntomas, sin embargo, es posible que tu médico te recomiende una serie de estudios como rayos x, medición del pH o cintilografía de reflujo.
- Acidez. Es uno de los síntomas más comunes del reflujo, sin embargo hay ocasiones en las que no se presenta. Generalmente sientes ardor entre el estómago y el esófago, pero también puede llegar a la garganta.
- Regurgitación. Se produce cuando la comida vuelve desde el estómago, junto con un sabor amargo o ácido en tu boca y garganta.
- Eructos. Con regurgitación, sensación de acidez, en ocasiones hipo y sensación de náuseas.
- Tos seca. Junto con sibilancias, dolor de garganta crónico y ronquera.
- Heces oscuras. En casos graves la mucosa del estómago se daña provocando la presencia de sangre en las heces, modificando su color a uno más oscuro.
Cuando este problema no es tratado adecuadamente o se extiende durante mucho tiempo puede desencadenar enfermedades más graves como la esofagitis por reflujo. Esto es la inflamación de los tejidos del esófago, lo que produce dolor, dificultad para tragar y dolor en el pecho, es provocada por la presencia de ácidos del estómago, pero también puede ser consecuencia de uso de medicamentos por vía oral, alergias e infecciones.
Tratamiento para el reflujo
Aunque en algunos casos tu médico te recomendará medicamentos para el reflujo o incluso cirugía, generalmente el reflujo gástrico puede resolverse con algunos cambios en el estilo de vida y remedios caseros, como los siguientes.
Consejos para evitar el reflujo
Si quieres prevenir el reflujo gástrico o reducir sus síntomas una vez que lo estás sufriendo presta atención a los siguientes consejos, son muy sencillos de seguir y significan cambios significativos en tu malestar.
- Evita ciertas bebidas y alimentos. Junto con el tratamiento médico indicado es recomendable que evites bebidas alcohólicas y alimentos condimentados, grasosos o ácidos. Lleva una dieta para la acidez estomacal y olvídate de los problemas.
- Come menos. Para facilitar la digestión debes reducir las porciones, aumentando la cantidad de ingestas diarias. Por ejemplo, en lugar de 3 comidas, haz 5.
- Da tiempo a la digestión. No te vayas a dormir apenas termines tu cena, deja un espacio de entre 2 y 3 horas antes de ir a la cama.
- Usa ropa suelta. Evita las prendas ajustadas para que tu cuerpo pueda trabajar mejor y digerir los alimentos correctamente.
Remedios caseros
Los remedios caseros están pensados para neutralizar la acidez estomacal así como también aliviar los síntomas de este problema tan molesto. Una bebida de agua con limón o un delicioso té de jengibre son algunos de los ejemplos que te harán sentir mejor rápidamente y con ingredientes que ya tienes en casa.
- Agua con limón. El limón es conocido por alcalinizar tu cuerpo. Puedes neutralizar la acidez tomando en ayunas un vaso de agua con zumo de medio limón. Repite a lo largo del día para mejores resultados.
- Té de jengibre. Si quieres mejorar tu digestión no dudes en los poderes del té de jengibre. Gracias a su capacidad de estimular la producción de enzimas, acelera la digestión y la comida está menos tiempo en tu estómago, reduciendo las posibilidades de sufrir reflujo.
- Té de manzanilla. Reconocido por sus propiedades para mejorar problemas estomacales y por ser un relajante natural, el té de manzanilla es otra opción a tener en cuenta para tratar la acidez y el reflujo.
- Vinagre de manzana. Actúa de forma similar al limón, mejora la digestión y reduce la acidez estomacal. Puedes usarlo para aderezar ensaladas.
Otros problemas gástricos
El reflujo gástrico es un trastorno común, pero no el único que puede ocasionar molestias, dolor y otros síntomas. Por eso aquí conocerás otros tres problemas gástricos que puedes sufrir.
- Úlcera estomacal. Ardor, náuseas, dolor abdominal, estomacal y fatiga son algunos de los síntomas que caracterizan a las úlceras estomacales.
- La gastritis. Aunque existen diferentes tipos de gastritis, casi todas comparten síntomas como vómitos, pesadez, indigestión, hipo y hinchazón abdominal.
- El estreñimiento. Dificultad para ir de cuerpo, no ir pasado un día, dolor estomacal, vientre inflamado e incluso erupciones cutáneas son algunos de los síntomas del estreñimiento.
1 Comentario en "Cómo curar el reflujo gástrico de forma fácil"
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