9 Trucos caseros para la tortícolis

Se conoce como torticolis al dolor de cuello extremo, que genera una rigidez en la zona cervical y que hace que prácticamente no puedas mover tu cabeza para los costados... ni para ningún otro lado. Sencillamente, es una dolencia única, que muchas veces está causada por una mala postura y que con algunos hábitos y cambios se puede superar sin ningún tipo de problemas.

Es por esto que no tienes más que poner atención a los trucos que podrás ver a continuación, ya que son perfectos para poder luchar contra la torticolis. Sólo tienes que probarlos y ver cuál es el que puede llegar a ser apropiado para solucionar este problema que estás padeciendo.

Estos son 9 trucos que te pueden ayudar a calmar la torticolis.

Cambiar de posición

Cuando estás mucho tiempo en la misma posición, la torticolis se puede volver algo mucho más probable. Por eso mismo, si eres de los que están en "zona de riesgo", no estés siempre en el mismo sitio. Párate, estira un poco, mueve tu cuello. Relájate unos minutos.

Aplicar calor

El calor puede llegar a ir muy bien para aflojar un poco el cuello y que este se comience a sentir mucho mejor, aflojándose poco a poco. Así es como no tienes más que aplicar sobre la zona, una vez ya consumada la torticolis. Verás que a lo largo del día la condición progresa notablemente.

Yoga o eutonia

Si comienza la torticolis a tornarse crónica o bastante habitual en tu vida, nada mejor que empezar a practicar algunas disciplinas que, con sus posturas y ejercicios de estiramiento, te ayudarán notablemente a superar esta molesta y dolorosa condición.

Cambiar de almohada

Esta puede ser una causa bastante probable de tu dolor de cuello. Trata de usar una almohada bien cómoda o anatómica para que el cuello no te duela tanto. La mala posición que te puede generar una mala almohada quizás sea determinante.

Ejercicios de relajación de cuello

Sin duda alguna, pueden ser muy importante a la hora de que tu cuello no esté tan dolorido por causa de la torticolis. Obviamente, escoge alguno que no te genere un gran esfuerzo, sino más bien suave. A medida que vaya cediendo el dolor, vas progresando.

Deja de fumar

¿Sabías que si fumas mucho haces que circule menos oxígeno por tu organismo y las contracturas y ese tipo de dolores sean moneda corriente? Por eso mismo, no sólo estarás beneficiando a tus pulmones y sistema cardiovascular; también a tu cuello.

Cambia de silla o sillón

Las personas que trabajan muchas horas sentadas frente a un ordenador, por ejemplo, son muy propensas a padecer torticolis. Sobre todo si tienen una silla o sillón deficiente, que los hace quedar en mala posición. Trata de trabajar de una forma confortable, con toda la espalda apoyada y con el cuello firme.

Evita dormir boca abajo

Esta posición suele ser fatal a al hora de causarte torticolis. Procura dormir siempre boca arriba o al menos de costado, para que tu cuello tenga algo de apoyo. Si puedes hacerlo en un colchón algo duro, pues mucho mejor todavía.

Cuando hace frío, una bufanda

Las bajas temperaturas pueden llegar a ser cruciales a la hora de causar torticolis. Por eso, si tienes tendencia a sufrir esta clase de problemas, no debes dejar descubierta la zona del cuello en ningún momento. Una bufanda, la mejor solución. Incluso si tienes frío dentro de tu casa.