La violeta es la flor de un gran número de géneros y especies de plantas. Las más conocidas y utilizadas para fines medicinales son las variedades europeas, entre las que se destaca la violeta dulce o Viola odorata, como se la reconoce en botánica.
Esta variedad de violeta posee diferentes nombres comunes, quizás la puedas conocer como: viola, violeta olorosa, violeta acopada, violeta aromática o violeta común. Claro está, que estas pequeñas flores además de ser muy apreciadas por su gran belleza ornamental, son muy valoradas por su delicioso aroma. Esta característica particular es la que las ha hecho famosas en el mundo de la cosmética y la perfumería.
Un hecho menos conocido aunque no menos importante, es que estas pequeñas plantas también poseen grandes propiedades medicinales. A sus hojas se le han reconocido propiedades antisépticas, capaces de curar heridas, llagas y quemaduras. También es bastante conocido su té o jarabe para tratar la tos o aliviar el dolor de garganta y la afonía.
¿No tienes ni idea de cómo preparar una infusión de violeta? Es una tarea muy sencilla, solo tienes que seguir los siguientes pasos.
Cómo preparar una infusión de violetas
- Coloca 1 cucharadita de hojas secas de violet para una taza de té.
- Lleva el agua a hervor.
- Cuando ya haya entrado en ebullición, retira del fuego y vierte sobre las hojas.
- Tapa y deja reposar por 5 minutos.
- Cuela y deja enfriar. Cuando ya esté templada la infusión realiza gárgaras con ella.
Intenta mantenerla por unos segundos en tu garganta. Repite varias veces al día este procedimiento hasta que desaparezca la afonía. También puedes beberla antes de irte a descansar.
¿Por qué es buena la violeta para tratar esta afección? Conoce la respuesta en los siguientes párrafos.
Beneficios de la infusión de violeta para tratar la afonía
Su potencial medicinal para tratar este tipo de dolencias está vinculado con su rico contenido en nutrientes. Entre los que se destacan:
- Mucílagos
- Ácido salicílico
- Violamina
- Saponinas
- Aceite esencial
- Alcoholes alifáticos: nonadienal, nonadienol y octodienol, eugenol, alcohol bencílico y parmona.
- Flavonoides: rutina y pigmentos carotenoides.
Estos componentes le brindan a la violeta, propiedades expectorantes, eméticas, béquicas, analgésicas y antiinflamatorias. Estas propiedades son capaces de devolver la salud y el sonido a las cuerdas vocales, desinflamando y calmando la faringe.
Ya sabes, la próxima vez quedes afónic@, ¡prepárate una infusión de violeta!
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