Cualquier tienda de perfumería almacena más de dos mil fragancias diferentes en su trastienda y las hay tanto de origen natural como de procedencia sintética. Lo importante de esto es que puede haber tantos tipos de aromas como personas, porque cada individuo puede manifestar una determinada predilección por un determinado tipo de aroma que, como norma, suele diferir del gusto o la predilección de otro individuo por mil factores diferentes.
Hay muchos tipos de fragancias:
- Verdes y boscosas, que recuerdan a helechos o césped recién cortado
- Chipres, que reflejan el aroma a musgo, pachuli o bergamota
- Refrescantes, que se agrupan en dos acordes olfativos románticos:
- los hesperidados
- frescos y frutados
- Florales, elaborados con esencia de flores
- Cálidas y especiadas, que se caracterizan por su sensualidad y se inspiran en los aromas de Oriente y en la combinación de especias (vainilla, canela)
- Maderas, que reflejan el olor vegetal de los bosques y las especias
- Ambarinas, que son los orientales y dulces
- Cueros, que huelen a tabaco, madera y papel
Los grandes clásicos del aroma se enmarcan dentro de los perfumes de las flores, aunque esto siempre va en gustos. Actualmente, destacan las fragancias orientales, consideradas como las más sensuales, evocadoras y místicas o los perfumes que proceden de la lavanda, el romero o la artemisa. Las afrutadas también tienen una gran aceptación entre la población más joven y, es que, unos toques de manzana, albaricoque, fresa, cereza en el olor corporal imprimen carácter.
De todas formas, elegir un perfume no es fácil. Pero una vez que haz encontrado tu propio aroma personal, uno que te distingue del resto y que te convierte en único, generas un sello personal y particular. Por ello, debes tener en cuenta que los perfumes son una cuestión muy personal y que, generalmente, el mismo perfume no desprende el mismo aroma en dos personas distintas. Esta es la razón por la que comprar un perfume, únicamente porque su aroma en otra persona te parece estupendo, no deja de ser un error muy habitual y muy caro, ya que los perfumes no suelen ser baratos.
El perfume, ese sensual objeto de deseo
La historia del perfume es tan antigua como la propia Humanidad.
El perfume siempre ha sido un objeto de deseo y sensualidad desde las más antiguas civilizaciones. Sus usos también han sido múltiples y han servido en infinidad de ocasiones para ceremonias religiosas, diversos rituales tribales, ofrendas religiosas (como en el Antiguo Egipto, Mesopotamia, Grecia) o incluso para curar determinadas afecciones o patologías así como elemento capital en el apasionante mundo de la seducción.
El perfume también ha sido utilizado por diversas culturas como elemento de intercambio y normalmente era considerado un signo de la aristocracia y de las clases altas, como elemento de poder y status social. Además, un buen perfume ha sido siempre un objeto probado de deseo y un elemento característico de una determinada cultura social.
Durante la Edad Media y muy relacionado con la monarquía y la corte francesa, los perfumes adquirieron su significado más sensual, precisamente en el momento en el que comenzaron a proliferar los baños con fragancias entre las altas clases sociales. Con el paso del tiempo, la cosmética francesa se ha ido asentando como una de las más variadas y cotizadas del orbe.
Hoy en día, el perfume es uno de los elementos más ligados a la atracción sexual y resulta imprescindible en todo lo que tiene que ver con la higiene y el aseo personal. Así, las firmas de cosmética guardan secreta y sigilosamente sus miles de pócimas y aromas para conseguir los perfumes más codiciados. De ahí que existan en el mercado más de 3000 fragancias, con las tonalidades y olores, más diversos.
Esencias más utilizadas en perfumes
Un perfume está constituido principalmente por esencias, luego el alcohol y otros ingredientes de fijación se añaden solo para graduar la intensidad y la duración de la fragancia.
- El ámbar es una de las notas cálidas de las fragancias más actuales.
- La lavanda, artemisa y romero componen la familia de los aromáticos.
- La vainilla y el benjuí entran dentro de los balsámicos.
- La nota de cuero se obtiene a partir del abedul y el alquitrán.
- Las florales utilizan rosa, clavel, gardenia, jazmín, orquídea, geranio, petunia o azaleas, mientras que las fragancias herbáceas proceden de la albahaca, menta y mejorana.
- Las frutales utilizan el melocotón, manzana, mandarina, melón o piña.
- La familia de las hespérides comprende los aceites esenciales de frutas como la bergamota, mandarina o limón.
- Las maderas son de cedro, pino, sándalo y musgo.
3 Comentarios en "Perfumes para seducir: ¿qué tipos de fragancias son los más utilizados?"
me gusta el aroam de tabaco canela y clavo de olor
me encantó el artículo de los perfumes, y en lo particular me encanta el aroma a vainilla, gracias por la información que es muy completa. felicidades por su página que es de mis favoritas porque es súper genial.
importante