Ahora que llega el verano y tras haber atravesado las pruebas más duras con la operación bikini y, las privaciones alimentarias, nos solemos relajar sobre la práctica deportiva, nada más lejos de lo recomendable.
Los calores veraniegos pueden ser un problema para mantener nuestra actividad deportiva cotidiana. La gimnasia no aeróbica nos ayuda a estar en forma y nos hace sudar menos, es muy recomendable y no deberíamos dejarla de lado durante los días de verano. Si bien, de forma moderada y suave para tonificar y fortalecer nuestros músculos. Por ello es muy recomendable practicar disciplinas como pilates, yoga y taichi, que ayudan a mantener la forma, sin excesivo esfuerzo.
Este tipo de disciplinas puede realizarse por todos los grupos de edad y por todas las personas, embarazadas, mayores, gente con lesiones ya que no son ejercicios aeróbicos, son clases controladas, dirigidas y en grupo que las hace más amenas y son actividades que unen el cuerpo con la mente, que invitan a la relajación y al control de la respiración (contra el estrés, ansiedad). En definitiva, son deportes basados en la relajación, la respiración, las posturas y la concentración.
En cuanto al Yoga, ayuda a encontrar el equilibrio y la unidad del cuerpo y alma, que puede ir desde una simple sensación de relajación hasta la búsqueda espiritual o meditación.
Por su parte, el taichi, destaca por que nos permite realizar movimientos suaves y armónicos, contribuyendo a dar flexibilidad a las articulaciones, disolviendo los bloqueos crónicos y restaurando el libre flujo energético; ahora bien, sólo hace falta disciplina, perseverancia y paciencia.
En cuanto a pilates, es más que una serie de ejercicios físicos ya que permite ejercitar al mismo tiempo el cuerpo y la mente. Sus tablas de ejercicios combinan la fuerza con la flexibilidad del yoga. A medida que se avanza con los ejercicios, se empiezan a conocer las partes fuertes y débiles de cada uno, además trabaja todos los grupos musculares.
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