La pintura en el hogar puede llegar a ser un tema bastante complicado si no se lo trata como se debe. Pero siempre existen trucos para mejorar esa tarea y para que no se vuelva engorrosa. Por suerte, el bricolaje siempre tiene armas para defender nuestras misiones y que se cumplan con éxito.
Estos son tres trucos fáciles para mejorar la pintura en tu hogar:
- Eliminar el olor a pintura que queda en la habitación: Este es un problema bastante recurrente a la hora de pintar interiores. Para evitarlo, se pueden seguir varios pasos. El primero de ellos, es colocar algunas cucharadas de esencia de vainilla en el bote de pintura. Si ya has pintado y el olor no se va, debes colocar un cubo con agua y algunas cebollas trozadas en su interior. Verás que el olor a pintura será parte del pasado en poco tiempo.
- No confíes en las pistolas de pintura: La mayoría de esas que venden por televisión o que se pueden comprar en cualquier parte a un precio módico, terminan siendo poco más, poco menos, un fraude. Una pistola profesional, sí, ya es otra cosa. Mientras tanto, el viejo y querido rodillo siempre estará allí para ser la mejor opción -y más económica- a la hora de pintar interiores.
- Conservar la pintura en buen estado: Seguramente te ha pasado que has tenido que parar la obra a mitad de camino y tienes miedo que la pintura se eche a perder. Pues entonces puedes hacer lo siguiente. Si no tienes muchos días por delante para volver a pintar, no tienes más que cerrar el bote herméticamente y dejarlo boca abajo. Así, no se formará una costra de pintura que te impida abrir la tapa. Si no sabes cuando volverás a repasar la habitación, pues al truco anterior, le sumas un chorro de aguarrás y misión cumplida.
No hay comentarios