Un padre nativo de Tauro, siempre apostará a su familia, siempre querrá verlos seguros protegidos y cómodos. El padre de Tauro es un padre cariñoso pero a la vez exigente. Pretenderá siempre con su típica perseverancia y terquedad, que sus hijos se labren un futuro sólido y sin espacio para el azar y las contingencias.
Buenas relaciones con un padre Tauro
Si tienes un padre de Tauro, y deseas viajar, o seguir una carrera de estudios que él no aprueba… ¡No te enojes, no lo presiones para que esté de acuerdo contigo! Recuerda que Tauro es equilibrado y sereno (cuando no lo presionan).
Siéntate con él, beban juntos una taza de té, en un momento de absoluta tranquilidad. Plantéale tus inquietudes y trata de convencerlo con argumentos racionales, sin escenas, sin caprichos. Tauro es tranquilo y necesita de argumentaciones lógicas para convencerse. Ponlo a prueba y verás.
Si bien la terquedad taurina en múltiples ocasiones, no es muy llevadera que digamos, todo puede solucionarse con una buena charla. Cuando cumplas años estarás de parabienes, el padre de Tauro por lo general realiza regalos muy costosos a sus hijos.
Por otro lado, los padres taurinos, son grandes confidentes y siempre se encuentran prestos a escuchar y resolver los problemas de sus hijos. ¡No dudes en pedirle ayuda si la necesitas!
Padre y marido Tauro
Ahora bien… si tienes un marido taurino, mi consejo fundamental es que no lo desautorices ante tus hijos. Si hay una actitud que a un padre taurino le resulta intolerable, es el hecho de ser interpelado ante sus hijos.
Busca el momento apropiado y cuando ambos estén solos y tranquilos ¡ataca! Pero siempre racionalmente, con cordura y racionalidad, podrás lograr que un taurino de ley, de lo mejor de sí. Para contigo y para con los más pequeños (o no tan pequeños) de la casa.
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