Me canso de oir hablar del té pu erh o té rojo como té de los emperadores. En fuentes serias sobre té no he encontrado ninguna referencia a que los emperadores tuviesen especialmente predilección por el té rojo pu-erh. Es más, es altamente improbable.
El té pu-erh se viene haciendo desde hace miles de años, de hecho se usaba para pagar impuestos ya con anterioridad al 200 a.C (que no es poco). Si no os lo creéis podéis leer la historia del pu-erh en la web pu-erhtea.com. Como es el único tipo de té que gana con el tiempo se ha usado durante siglos como moneda. Para ello se prensaba el té en pequeños bloques que facilitaban su transporte e intercamio. Durante siglos se utilizó como moneda en el comercio de caravanas y pago de impuestos.
Sin embargo el pu-erh está asociado en China a un té medicinal que se suele consumir después de comidas pesadas para facilitar la digestión y como remedio contra la resaca, ya que aumenta el metabolismo del hígado.
En China, en cambio los grandes tés siempre han sido finas elaboraciones de té blanco o té verde muy especiales. Normalmente recogidos selectamente a mano en determinadas zonas, en determinados días, e incluso, a determinadas horas del día. También algunos oolong se encuentrasn entre los más apreciados. Así que lo normal es que los emperadores tomasen sobre todo tés blancos de alta calidad.
Ya hablaré más sobre otros mitos y realidades del pu-erh.
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