Se acerca la Navidad y con ello, no sólo las fiestas que se celebran en familia, sino también las comidas y cenas de empresas.
Compartiré contigo algunas de las reglas básicas de etiqueta para organizar la fiesta con éxito y disfrutarla.
- A la hora de organizar una fiesta es importante que se deleguen diferentes tareas en varias personas, pero no olvides poner a una persona como responsable para que lo coordine todo.
- En la invitación hay que indicar muy claramente el lugar, la hora, el día así como el tipo de vestuario que se requiere.
- Si se va a servir comida, como suele ser habitual, es importante tener en cuenta los diferentes tipos de regímenes alimentarios que pueden seguir los invitados. No cuesta mucho tener varios productos sin cerdo para que puedan comer los musulmanes y judíos y poner varios platos vegetarianos que todo el mundo podrá comer.
- Evita que los invitados beban demasiado alcohol, proporciona suficientes bebidas no alcohólicas como zumos, aguas y refrescos, así como canapés.
- Es el momento de practicar tus dotes sociales y ampliar tus redes de contactos. Procura recordar los nombres de las personas con las que te encuentras. Aprovecha para conocer y conversar con personas de diferentes departamentos, procura no centrarte sólo en el pequeño grupo de compañeros habituales.
Cuando estés en la mesa procura hablar con todas las personas que tienes cerca e incluirlas en la conversación. Por favor, no monopolices sólo a una persona. - Recuerda las buenas maneras a la hora de comer. Los cubiertos se utilizan desde afuera hacia adentro. Tus vasos o copas son las que se encuentran a tu derecha y tu pan es el que se encuentra a la izquierda.
La servilleta se pone en el regazo y no se pone como un babero atada al cuello.
Si se te cae algún cubierto al suelo, llama al camarero y pídele con educación que te traiga otro. - ¿Cómo vestir en una fiesta de trabajo? Como estamos en un ambiente profesional tenemos que ser especialmente cuidadosos. La etiqueta de vestuario se suele indicar en la invitación. Si no es así y se trata de una cena podemos optar por darle un aire más festivo a nuestro atuendo con prendas de colores más llamativos en el caso de las mujeres, algo de brillos y accesorios acordes con la situación. Eso sí, es mejor evitar los escotes muy pronunciados, las espaldas al aire, los vestidos muy mini, aquello que sea abiertamente sexy ya que estamos con compañeros de trabajo y no con nuestros amigos o familia.
Los hombres con un traje oscuro van muy elegantes.
En el caso de que sea una fiesta informal, tenemos que ceñirnos a lo que se ha fijado y no acudir con un vestido formal porque tengamos ganas de estrenar un nuevo traje o vestido.
Sigue estos consejos, fáciles de aplicar, para disfrutar de las fiestas. Entre todos, invitados y anfitriones, tenemos que crear un ambiente agradable, ampliar nuestro círculo de conocidos y por supuesto, pasarlo bien.
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