Según la tradición filosófica oriental que vela por la armonía energética del espacio que conocemos como hogar y su contenido, detalles como los colores con los que "vestimos" las paredes, la orientación de las habitaciones, las formas geométricas del mobiliario o la ubicación de la entrada, por poner algunos ejemplos, son factores que pueden facilitar o dificultar dicha armonía, generada como consecuencia de la fluidez o no de las energías vitales que pueblan todo espacio en el que nos movemos y sentimos.
Sin embargo, todos estos detalles que el Feng Shui aconseja observar para convertir nuestra vivienda en fuente de bienestar física, mental y espiritual, no sirven de nada si no son presididos por un principio que resulta primordial para esta disciplina milenaria: el orden.
Así, para alcanzar el nivel de orden y armonía que el Feng Shui nos aconseja, la primera operación que debemos llevar a cabo antes que ninguna otra- es limpiar completamente la vivienda, y no nos referimos sólo a barrer y a pasar la fregona, sino también y fundamentalmente- a vaciar todas las habitaciones de todos aquellos objetos cuya función no esté demasiado bien definida, así como aquellos cuya presencia relacionemos con experiencias negativas del pasado.
En pocas palabras, debemos librarnos de todo lo que no contribuya de forma activa a cargar de energía positiva nuestro espacio vital.
Esta concepción del orden no debe estar presente sólo en la limpieza y en la elección de los objetos, sino también en su ubicación. Así, la acumulación de objetos o mobiliario de tal forma que se interpongan en un espacio de paso por ejemplo, en el espacio de apertura de una puerta o en un pasillo- o en mitad de un lugar hacia el que solemos mirar de forma habitual delante de la televisión o de la puerta de entrada- contribuyen a generar cierta sensación de caos que, ya en el ámbito del subconsciente, aporta cargas negativas, además de impedir que la energía fluya libremente.
1 Comentario en "El Feng Shui y el orden en el hogar"
Nunca está de más recordar este principio del orden, tan útil y verdadero!!