Diferencias de sexo en la práctica de ejercicios

A pesar de las diferencias anatómicas-fisiológicas que disminuyen la potencia física de la mujer (talla, tamaño del corazón, masa muscular, etc.) el avance del sexo femenino es cada vez más grande y rápido en su condición física, acercándose a los registros de los hombres en los deportes de alto rendimiento.

Diferencias anatómicas

• La mujer tiene menor talla, peso y masa magra (muscular) que el hombre, es decir una estructura física más ligera y pequeña.
• Los factores hormonales también cumplen un papel fundamental determinando una menor masa ósea, mayor porcentaje de grasa y menor masa magra, lo que dificulta el rendimiento deportivo.
• La pelvis es más ancha y menos profunda, la angulación del fémur es mayor, lo mismo que la curvatura lumbar, dificultando el entrenamiento con altas cargas.
• El centro de gravedad se sitúa un 6% más bajo que el del hombre, por tanto tiene más estabilidad en la vertical.

Diferencias cardiovasculares

• La mujer tiene una caja torácica más pequeña, un corazón de menor tamaño y menos cantidad de sangre y volumen sistólico (cantidad de sangre que expulsa el corazón en una sola contracción), por tanto su frecuencia cardíaca es mayor para realizar un mismo trabajo.
• También la mujer tiene menor concentración de hemoglobina en sangre (15% menos)y del número de hematíes, por tanto una menor capacidad de transporte de oxígeno hacia todos los tejidos.
• Existen otras diferencias que por razones de espacio no se pueden enumerar. Lo importante es conocer los principales factores entre el hombre y la mujer, para de este modo diseñar los planes de acondicionamiento en forma más personalizada.