¿Cómo se puede seducir a un hombre?

Para seducir a un hombre es necesario cuidar la vestimenta, la ropa interior y resaltar en la exterior aquello más atrayente y favorecedor de nuestra figura, según una experta.

La sexóloga Pilar Cristóbal señala que "hay que cuidar la ropa interior y la exterior, resaltando los aspectos más favorecedores de la figura". Para la experta, la higiene personal es esencial, tanto para mujeres como para hombres, "aunque evidentemente, las mujeres suelen ser más estrictas en su aseo diario que ellos", asevera.

Extremar la higiene, depilarse correctamente y afeitarse, son sólo algunos consejos importantes a la hora de lanzarnos a la ardua tarea de seducir. De hecho, unas piernas pobladas de vello o una axila en similares condiciones, en general, no gustan demasiado. La experta señala que "hoy en día, existen muchas mujeres que no se afeitan, depilan, maquillan o arreglan con coquetería ya que lo hacen más por comodidad que por testimonio".

A la hora de seducir a un hombre es necesario tener claro que trataremos de atraer, de encandilar, de emocionar, de sujetar y de hacer enloquecer y para ello se utilizarán todas las armas seductoras que se nos ocurran. Hoy en día, se ha puesto muy de moda el depilado estético del pubis, de manera que se deje una pequeña hilera que marque la unión de los labios mayores o que incluso recorten los bordes en forma de corazón. Se puede incluso teñir aunque dependerá de cada persona.

Cuidar la ropa interior y la exterior resaltando los aspectos más favorecedores de la figura es importante ya que hace más fácil la seducción, aunque en el sexo es bueno respetar ciertos convencionalismos, como dejar que sean ellos los que se acerquen aunque no esté de más sugerir con la ropa, la sonrisa o la mirada. El ser coqueta, sutil, delicada y cargada de intención es mucha mejor estrategia que ser demasiado directa o expresar abiertamente los deseos.

Además, no podemos olvidar que los hombres necesitan tres cosas para dejarse seducir, como son ciertas dificultades, sentirse admirados y únicos, según la experta.